
Todas las personas tenemos necesidades básicas comunes, que se traducen en derechos humanos fundamentales: el derecho a la educación a expresarnos con libertad y a ser tratados con dignidad y respeto, por ejemplo.
Cuando estas necesidades fundamentales no se satisfacen nos encontramos frente a inequidades, que pueden darse tanto en los países industrializados como en países en desarrollo.
Lo que convierte estas situaciones en injusticias es que pueden ser evitadas: no se trata de problemas irresolubles a los que no podamos hacer frente, sino que a menudo han sido provocados por personas y persisten porque mucha gente se desentiende de ellos.
Es por ello que se busca erradicar la pobreza y promover el empleo pleno y el trabajo digno, la igualdad de genero y el acceso al bienestar social y la justicia social para todos.
Nuestra Red Solidaria trabaja por la Justicia Social en 9 Estados del país, atendiendo tres áreas indispensables para lograr este valor: alimentación, educación y salud.
1.- La educación de más de 300 niños.
2.- La alimentación de más de 5000 personas en situación de riesgo.
3.- La salud de más de 2.076 beneficiarios
Mientras que las sociedades y las instituciones tienen la esperanza de construir una coalición por la justicia social, el Papa Francisco nos invita a abrazar la justicia en el contexto de la amistad social para «trabajar por un orden social y político cuya alma sea la caridad social» (Fratelli Tutti, 180); e incluso lanzó un desafío: «Urge encontrar nuevas soluciones que puedan ir más allá del enfoque de esas políticas sociales» (Mensaje de la Jornada Mundial de los Pobres 2022) frente a las injusticias sociales, económicas y ambientales.
En nuestra Red ARCORES, nos esforzamos por llevar a la práctica nuestro compromiso con la justicia social, animando a toda nuestra red en diferentes Estados a trabajar y comprometerse con programas que promuevan la «justicia para todos» ya sea en zonas con problemas de pobreza, o en sociedades donde las injusticias son evidentes y crecientes y afectan a la vida de las personas, o en un ambiente de discriminación por raza, religión y género.