
Celebramos la sexta edición del Día Internacional de la Educación bajo el lema “aprender para una paz duradera”.
Y es que, además de ser un derecho universal, la educación es garantía de la paz, pues al ser accesible para todos y durante toda la vida, la enseñanza y el aprendizaje pueden evolucionar para hacer frente a amenazas como la violación de los derechos humanos, el mal uso de las tecnologías digitales, el descuido del planeta y demás situaciones que agudizan los problemas emergentes de las limitaciones económicas e iniquidades en todos los ámbitos.
ARCORES Venezuela y la educación
Es por esto, que ARCORES Venezuela a través de sus programas, promueve la acción individual para realizar cambios positivos hacia el logro de la paz interior y por ende de la paz mundial.
Especialmente hoy, es oportuno reconocer el arduo trabajo desempeñado por todos los actores de esta red solidaria que, desde los apadrinamientos, comedores y becas escolares, no solo proporcionan un aporte económico, sino que además, acompañan y orientan a miles de niños, niñas y adolescentes hacia la prosecución de sus estudios y el paso de las metas soñadas a realidades palpables para que -movidos por la alegría y la esperanza- se comprometan incansablemente a trabajar por la paz duradera.
En este día Internacional de la Educación, es posible sumar esfuerzos en sociedad con ARCORES Venezuela, colaborando y promoviendo las jornadas de corazón solidario y diciendo sí a sus propuestas de mover corazones y transformar vidas, que al mismo tiempo contribuyen con las metas de los Objetivos de Desarrollo Sostenible 2030.
Una oportunidad para la paz y la solidaridad
Cada día es una oportunidad para mejorar las realidades personales y colectivas, para luchar por la igualdad y el respeto a la vida. Cada día, es una oportunidad para demostrar que la educación y la solidaridad son las herramientas para lograr la paz. ¡Feliz día Internacional de la Educación!

Lcda. Osmely Porras, voluntaria en el programa de Apadrinamientos y Becas Escolares llevados a cabo en Palmira, estado Táchira, Venezuela.